Somos una Congregación misionera fundada por el Arzobispo San Antonio María Claret en Vic (España), el 16 de julio de 1849, aprobada por Pío IX el 22 de diciembre de 1865.
Nos llamamos Hijos del Inmaculado Corazón de María o Misioneros Claretianos.
El objeto de nuestra Congregación, tal como nos lo enseñó nuestro Santo Padre Fundador, es buscar en todo la Gloria de Dios,
la santificación de todos sus miembros y la salvación de los hombres de todo el mundo, según nuestro carisma misionero en la Iglesia.
La fundación de la Congregación se atribuye a la intervención de la Santísima Virgen, a quien tenemos como Patrona bajo el título de su Inmaculado Corazón.
Siendo y llamándonos Hijos de su Corazón, la veneramos con amor y confianza. Y nos entregamos a Ella para ser configurados con el misterio de Cristo.