El sábado 9 de Noviembre, la Parroquia del Purísimo Corazón de María llevó a cabo la Asamblea Parroquial 2024, en donde la comunidad se reunió en un ambiente de reflexión y diálogo para compartir experiencias y proponer acciones que enriquezcan el camino Sinodal y la vida de la Iglesia Diocesana.

La Asamblea es un espacio de encuentro que tiene como propósito la renovación pastoral, así como la fidelidad a la misión de Jesús y preparar el camino hacia los retos futuros.

El programa inició con un Primer Momento, denominado contextualización, en donde se invitó a los participantes a poner en práctica algunas de las 5 pautas emanadas de la XXIII Asamblea Arquidiocesana  (Escuchar con Empatía y Acoger con Compromiso), y también se conversó sobre los resultados del recorrido pastoral ante la realidad y desafíos que interpela hoy la atención pastoral.

Continuamos con el Segundo Momento, de preparación a la conversación en el Espíritu, con el acompañamiento del Santísimo Sacramento y a la luz de la palabra del Evangelio, se tuvo un encuentro personal con Cristo para reflexionar sobre el legado de evangelización que él nos dejó y así reflexionar sobre la responsabilidad que tenemos como discípulos, Misioneros y comunidad en la actualidad.

Finalmente, en el Tercer Momento, de conversación en el Espíritu, se animó a los participantes a apuntar hacia su horizonte pastoral en un contexto de Fraternidad. Con el acompañamiento del Espíritu Santo, los equipos de reflexión propusieron acciones concretas para fortalecer el proceso de Evangelización y mejorar el funcionamiento de los equipos pastorales dentro de la Parroquia.

Partiendo de todas las ideas generadas en la Asamblea Parroquial, el Párroco y el Consejo de Pastoral realizarán un análisis para plasmar los compromisos en la programación pastoral para avanzar en comunión internamente y con el decanato.

Con esta Asamblea Parroquial, reafirmamos nuestro compromiso con la renovación pastoral y la participación de todos los agentes de la pastoral. Llamamos a todos los fieles a seguir involucrándose en las comunidades o grupos parroquiales, fomentando un espíritu de diálogo y colaboración que refleje el amor de Cristo en cada acción.