Rosario en Clave Misionera

Rosario en Clave Misionera

El Rosario es una devoción mariana de las más antiguas que es conocida en el pueblo cristiano. Al rezar el rosario misionero, estamos pidiendo por todo el mundo, para que llegue a todos los rincones el anuncio del Reino de Dios. Al mismo tiempo rezamos por todos los misioneros, misioneras, para que Dios los siga bendiciendo, dándoles la  fortaleza y confianza, la esperanza y la caridad, y así puedan continuar en el caminar diario y no se cansen de predicar su Palabra.

 

        Ofrecimiento:

 

Virgen Santísima, que en los montes de Fátima te dignaste revelar a tres humildes pastorcitos los tesoros de gracia contenidos en la práctica de tu santo rosario, imprime profundamente en nosotros estima de esta devoción que es tan querida, y haz que, meditando los misterios de nuestra redención que en ella se nos recuerda, merezcamos recoger sus frutos preciosos. Así sea.

 

Misterios de Gloria

 

         1er. misterio: “La resurrección de nuestro Señor Jesucristo”

         Reflexión. “El ángel se dirigió a las mujeres y les dijo: No teman , pues que buscan a Jesús, el crucificado; no está aquí, ha resucitado, como lo había dicho. Vengan y vean el lugar donde estaba. Y ahora vayan en seguida a decir a sus discípulos: “Ha resucitado de entre los muertos” (Mt 28,5-6).

         Oremos: este misterio, Señor, te lo ofrecemos por todos nuestros hermanos africanos, para que los sigas bendiciendo y, con la alegría de Jesús resucitado, encuentren la fortaleza de perseverar en su fe, y que los que todavía no te conocen puedan escuchar tu Palabra a través de nuestros hermanos misioneros.

         (Se reza un Padre Nuestro; diez Aves Marías y un Gloria).

 

        Señor, yo creo. Señor, yo espero. Señor, yo te amo. Te pido perdón por todos aquellos que no creen en ti, que no esperan en ti y que no te aman.

         María, madre de gracia y de misericordia; En la vida y en la muerte ampáranos, gran Señora.

 

Canto: Madre de los creyentes, que siempre fuiste fiel, dános tu confianza, danos tu fe, dános tu confianza, danos tu fe. Pasaste por el mundo en medio de tinieblas, sufriendo a cada paso la noche de la fe, sintiendo todavía la espada del silencio; a oscuras padeciste el riesgo de creer. Madre …

 

Letanías:            San Marcos,                              Ruega por Africa

                            San Agustín de Numida,

                            Venerable Carlos de Foucold,

                            Beata Clementina Anaurite,

                            Santos Mártires de Uganda,

        2do. misterio: “La ascensión del Señor a los cielos”

         Reflexión. “Jesús los condujo hasta cerca de Betania y levantando las manos, los bendijo, Y mientras los bendecía, se alejó de ellos y fue llevado al cielo” (Lc 24,50-51).

         Oremos: Señor, al rezar este segundo misterio, tenemos presente a toda América, para que así como un día llegó a esta tierra el conocimiento de tu Palabra, ella mueva nuestros co-razones para seguir trabajando en extender tu Reino.

         (Padre Nuestro; Aves Marías y Gloria)

 

        Señor, yo creo. Señor, yo espero. Señor, yo te amo. Te pido perdón por todos aquellos que no creen en ti, que no esperan en ti y que no te aman.

María, reina de las misiones. Ruega por nosotros. Se puede hacer un canto.

 

Letanía:                 San Francisco Solano                  Ruega por América

                            Santa Rosa de Lima                    Ruega por América

                            San Martín de Porres

                            San Felipe de Jesús,

                            San Toribio de Mogrovejo

                            San Pedro Clavel

                            Beatos y Santos del Nuevo Mundo

 

         3er. Misterio: “La venida del Espíritu Santo sobre María Santísima y los Apóstoles en el cenáculo”

         Reflexión. “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en un mismo lugar. De pronto vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego, que, separándose, se fueron posando sobre cada uno de ellos; y quedaron llenos del Espíritu Santo y se pusieron a hablar idiomas distintos, en los cuales el Espíritu les con-cedía expresarse” Hch 2,1-4).

         Oremos: Padre amoroso, te pedimos por medio de la Santísima Virgen María por todos los europeos, para que no decaiga el espíritu misionero y resurja en ellos el deseo de seguir trabajando en todos los lugares donde haga falta que llegue el anuncio de tu Reino.

 

         (Padre Nuestro; Aves Marías y Gloria)

 

         * Señor, yo creo. … María, madre de gracia, Madre .. Canto

 

Letanía:                 San Bonifacio de Alemania                   Ruega por Europa

                            San Agustín de Canterbury                   Ruega por Europa

                            San Patricio de Irlanda

                            San Remigio de Reims

                            San Leandro de Sevilla,

                            San Christian Rey de Dinamarca

                            Beatos y Santos de Europa,

 

        4o. Misterio: “La asunción de la Virgen Santísima”

         Reflexión “Apareció en el cielo una señal gloriosa: una mujer vestida del sol, con la luna bajo los pies y en su cabeza una corona de doce estrellas” (Ap 12,1). El Concilio Vaticano II declara: “La Virgen Inmaculada, terminado el curso de su vida terrena, fue asunta a la gloria celestial en cuerpo y alma"

 

         Oremos: Te encomendamos, Señor, en este cuarto misterio a todo el continente de Oceanía, para que tu Palabra llevada por tantos misioneros a este lejano Continente sea escu-chada, cada vez haya más conver-siones y despierte en ellos el deseo de servirte en otros lugares.

 

                   (Padre Nuestro; Aves Marías y Gloria)

                   * Señor, yo creo. …

                   * María, reina de las misiones      Ruega por nosotros. Canto

 

Letanía                  Padre Damián de Hancy             Ruega por Oceanía

                            San Pedro Chanel                      Ruega por Oceanía

                            Estrella del Mar

                            Madre Amable

                            Madre llena de clemencia

                            Madre del buen consejo

                            Madre del Creador

                            Beatos y Santos de las innumerables islas,

 

         5o. misterio: “La coronación de la Santísima Virgen como reina y señora de todo lo creado”

         Reflexión. El Concilio Vaticano II afirma: “La Virgen Inmaculada, fue asunta a la gloria celestial y enaltecida por el Señor como reina del universo, para que se asemejara más plenamente a su hijo vencedor del pecado y de la muerte”. “Junto a la cruz de Jesús estaba su madre, la hermana de su made, María la mujer de Cleofás, y María Magdalena. Jesús al ver a su madre y junto a ella al discípulo a quien tanto amaba, dijo a su made: "Mujer, ahí tienes a tu hijo". Después dijo al discípulo: "Ahí tienes a tu madre". Y desde aquel momento el discípulo la recibió como suya” (Jn 19,25-27).

 

         Oremos: Por todos los que forman el Continente de Asia te pedimos, Señor, para que siga llegando el anuncio de tu Reino a estas regiones y muevas los corazones de los que aún no te conocen, para que día a día se extienda tu mensaje de amor por ca-da uno de ellos.

 

         (Padre Nuestro; Aves Marías y Gloria)

        Señor, yo creo…     María, madre de gracia… Se puede hacer un canto.

 

Letanía:              San Andrés                      Ruega por Asia

                            Santo Tomás                   Ruega por Asia

                            San Juan de Brito

                            Beato Teófano Venered

                            Beato Valentín Berreochoa

                            Santos Mártires de Corea

                            Beatos y Santos Mártires de Asia

                            Por las intenciones del Papa: Padre Nuestro, Ave María y Gloria

 

         Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios. No desprecies las ora-ciones que te hacemos en nuestras necesidades, antes bien líbranos de todos los peligros, oh Virgen gloriosa y bendita. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.

 

         Todos: Señor Jesucristo, Tú que derramaste tu sangre para lavar los pecados de todos los hombres, haz que ninguno de ellos quede sin recibir los beneficios de la redención. Infunde en el corazón de todos los bautizados el deseo de propagar la fe. Cultiva en el corazón de los jóvenes el sublime ideal de entregarse al servicio del prójimo. Sostén el ánimo de aquellos que, abandonándolo todo, cumplen tu mandato de ir por el mundo anunciando la Buena Nueva. Crea en mí un corazón misionero. Amén. Reina de las misiones, ruega por todo el mundo.