Desde hace algunos años las Colonias Narvarte, Valle y Nápoles se han convertido en el botín preciado de Empresas Inmobiliarias que compran casas a módicos precios, las demuelen completas en un par de horas (de verdad que es increíble la velocidad con la que trabajan) o días, en el peor de los casos, e inmediatamente construyen ocho, diez, doce o más departamentos.

         El Centro de Pastoral de la Parroquia se encuentra ubicado en las calles de Torres Adalid y Heriberto Frías. Durante muchos años fue la sede del Colegio San José del Valle y posteriormente, sede de la Universidad Marista. Los vecinos de la esquina vendieron su casa a la Empresa Splendor que al cimentar su construcción lastimaron parte del piso y algunos muros del Centro de Pastoral.

         Cuándo nos dimos cuenta estábamos en plena contingencia por la Pandemia. Una circunstancia que obligó a que los Niños y Niñas de la Catequesis, permaneciendo en sus hogares, tomaran las Sesiones de forma virtual. Gracias a ello, el edificio estaba vacío y nadie peligraba.

         Con la asesoría y apoyo de la Arquitecto Catalina Nieto hicimos las diligencias para que la Empresa asumiera la responsabilidad y corrigiera los daños ocasionados. Durante varias semanas, tuvimos una ola de fotos, consultas, entrevistas, diálogos y decisiones. Gracias a Dios, y a la presión constante de la Arquitecto, la semana pasada nos entregaron la obra terminada con la garantía del Ingeniero Estructurista responsable de que los daños no comprometen la estructura del Centro de Pastoral garantizando así la integridad física de los ocupantes.